Acerca de ACS

El Ámsterdam Center for Sex Workers (ACS) proporciona información, asesoramiento y asistencia a los trabajadores sexuales de la región de Ámsterdam. Contratamos a enfermeras y trabajadores sociales.

Ámsterdam Center for Sex Workers está ubicado en el centro de Ámsterdam y es fácilmente accesible en transporte público. Los tranvías 2, 11 y 12 paran prácticamente a la entrada de nuestro centro.

ACS
Nieuwezijds Voorburgwal 292
1012 RT Amsterdam
020 – 531 86 00
info@centerforsexworkers.nl

Cómo comenzó ACS

En 2005, las integrantes del PvdA Karina Schaapman y Ama Assante investigaron abusos en el sector de la prostitución en Ámsterdam. Aparte de la atención médica que ofrece el Municipio Servicio de Salud Pública (GGD), descubrieron una grave carencia: un organismo donde pudieran acudir las trabajadoras sexuales con preguntas sobre sus derechos y obligaciones, así como para encontrar asistencia psicosocial.

El ayuntamiento acogió con agrado su recomendación de establecer un centro donde pudiese encontrarse este tipo de atención. Tres años después, en abril de 2008, el Centro de Prostitución y Salud,abrió sus puertas en Nieuwezijds Voorburgwal 292 en Ámsterdam.

En 2023, pasó a llamarse Ámsterdam Center for Sex Workers (ACS) para reflejar mejor su
propósito. ACS es una alianza entre HVO-Querido y Centrum voor Seksuele Gezondheid (GGD Ámsterdam) y está financiado por la ciudad de Ámsterdam.

Misión y visión

ACS promueve el empoderamiento y la emancipación de las trabajadoras sexuales. Independientemente de su sexo, lugar de trabajo o situación de residencia. Hacemos esto para:

  • Mejorar la situación de salud física de las trabajadoras sexuales
  • Fortalecer de su salud psicosocial
  • Mejorar su estatus social y laboral
  • Identificar y abordar las formas de violencia y explotación sexual

ACS asume dos valores fundamentales en torno a todas sus actividades:

  1. Libertad de ocupación (autonomía): toda persona tiene derecho a elegir libremente y ejercer su oficio; nunca debe haber explotación u opresión en ninguna forma.
  2. Integridad corporal y resiliencia: toda persona tiene derecho a no ser vulnerada. La autonomía personal nunca debe degradarse hasta verse obligado a realizar o sufrir cualquier acción. Esto requiere resiliencia.